
Torero
El toro de lidia español (Toro Bravo, toro de lidia, toro lidiado, ganado bravo, Touro de Lide) es una población ganadera ibérica heterogénea[1] que se cría exclusivamente en libertad en fincas extensas de España, Portugal, Francia y países latinoamericanos donde se organizan corridas de toros. Los toros de lidia se seleccionan principalmente por una determinada combinación de agresividad, energía, fuerza y resistencia. Durante la cría, para preservar sus características naturales, los toros rara vez se encuentran con seres humanos y, si lo hacen, nunca a pie.
La agresividad del toro se ha mantenido (o aumentado, véase más arriba) mediante la cría selectiva y ha llegado a ser popular entre los pueblos de España y Portugal y las partes de América Latina donde arraigó durante el dominio colonial, así como en partes del sur de Francia, donde la tauromaquia se extendió durante el siglo XIX.
En mayo de 2010, científicos españoles clonaron la raza por primera vez. El ternero, llamado Got, que significa “cristal” en valenciano, se clonó a partir de un toro llamado Vasito y se implantó en una madre anfitriona frisona[3].
Los toros son agresivos
Sin el toro no hay corrida, no sólo es una verdad semántica, basada en la propia palabra corrida, sino también de comportamiento. Todo el diseño y la estructura de la corrida de toros de los últimos trescientos años ha crecido en torno al toro de lidia español, un hecho consagrado en la Ley de la Corona española.
Artículo 48. (Nota: esta ley utiliza una variedad de términos españoles que no tienen traducción directa, así que doy el sentido en su lugar – AFH) Los tuertos, los tuertos, e incluso aquellos con cuernos desiguales están prohibidos en la plaza de toros, excepto para ciertos tipos de festivales y peleas de entrenamiento, y entonces sólo si se anuncia que no son toros de lidia en toda regla.
Sin embargo, estos son los huesos desnudos del toro de lidia, no el meollo de la cuestión. Son los rasgos anatómicos, fisiológicos y de comportamiento particulares que distinguen al toro de lidia español de otras reses -y al ganado en general de otros animales- los que constituyen los requisitos de la corrida, porque la esencia de la corrida moderna, en el lado no humano de los cuernos, es la embestida.
Corrida de toros
Un toro de Miura es un toro de lidia español criado a partir del linaje de la Ganadería Miura, situada en la provincia de Sevilla, España. La ganadería pertenecía originalmente a Don Eduardo Miura Fernández, y es conocida por producir toros de lidia grandes y difíciles. Un toro de Miura debutó en Madrid el 30 de abril de 1849.
La ganadería de Miura se encuentra en la finca Zahariche, a pocos kilómetros del pueblo de Lora del Río, en la provincia de Sevilla. La finca, ocupada por los Miura desde 1842, abarca más de 600 hectáreas, y en sus tierras viven varios cientos de toros, bueyes, vacas y terneros. La ganadería emplea a doce personas, entre ellas ocho vaqueros andaluces. En la actualidad, la ganadería está presidida por Eduardo y Antonio Miura, hijos del fallecido Don Eduardo. Según Eduardo Miura, la ganadería pretende “criar por calidad, no por cantidad”.
Hay ciertas razas de toros con una marcada capacidad de aprender de lo que ocurre en la plaza… más rápido de lo que avanza la lidia en sí, lo que hace que sea más difícil de un minuto a otro controlarlos… estos toros son criados por los hijos de Don Eduardo Miura a partir de antiguos ejemplares de lidia…
Acoso a los toros
El toro de lidia español (Toro Bravo, toro de lidia, toro lidiado, ganado bravo, Touro de Lide) es una población bovina ibérica heterogénea. Se cría principalmente en libertad en fincas extensas de España, Portugal y países latinoamericanos donde se organizan corridas de toros. Los toros de lidia se seleccionan principalmente por una determinada combinación de agresividad, energía, fuerza y resistencia.
El toro de lidia se caracteriza por su comportamiento agresivo, especialmente cuando es solitario o no puede huir. Muchos son de color negro o marrón oscuro, pero otras coloraciones son normales. Alcanzan la madurez más lentamente que las razas de carne, ya que no fueron seleccionados para ser pesados, teniendo en cambio un aspecto “atlético” bien musculado, con un morillo prominente, un complejo de músculos sobre el hombro y el cuello que da al toro su perfil distintivo y fuerza con sus cuernos.
Entre el ganado de lidia hay varios “encastes” o subtipos de la raza. De las llamadas “razas fundacionales”, hoy en día sólo quedan las líneas de sangre de Vistahermosa, Vázquez, Gallardo y Cabrera. En el caso de las dos últimas, sólo las ganaderías de Miura y Pablo Romero están profundamente influenciadas por ellas. Las llamadas “líneas fundacionales modernas” son Saltillo, Murube, Parladé y Santa Coloma, todas ellas compuestas principalmente por sangre Vistahermosa.