
Precio del tequila Espolón
He bebido muchos cócteles malos en mi vida. Ya sabes cómo son: aguados, azucarados y que apestan a alcohol barato. En retrospectiva, sólo puedo culparme a mí misma; rara vez pensaba en lo que había que hacer para preparar un buen cóctel, y me daba demasiado miedo probar cualquier cosa que no llevara ron.
Entonces conocí a mi marido, que resultó ser un gran aficionado a los licores. De verdad. Antes de conocerlo, ni siquiera utilizaba la palabra “licor”. Me presentó diferentes variedades de bourbon, centeno y whisky, y me enganché inmediatamente. Resulta que no estaba destinada a tomar malas bebidas para la eternidad.
La vida es demasiado corta para tomar malos cócteles, así que he preparado esta sencilla guía con la esperanza de que te ponga en la vía rápida para beber mejor. Si sigues leyendo, también encontrarás la receta de mi margarita favorita al final de este post.
Salga de su zona de confort. Todos tenemos una bebida alcohólica favorita; la mía es el ron. Sin embargo, cuando bebes lo mismo una y otra vez, es fácil convencerte de que eso es todo lo que te gusta. Te pierdes la oportunidad de probar diferentes combinaciones de sabores, lo cual es clave a la hora de aprender lo que hace una bebida equilibrada. Por ejemplo, sé que no soy un gran fan de la ginebra, pero sigo pidiendo cócteles de ginebra de vez en cuando para ver si me gusta. Esto ha tenido el beneficio añadido de darme pistas sobre qué sabores van bien con la ginebra para mí. La mayoría de las veces, no se trata sólo de la bebida principal, sino también de lo que los ingredientes secundarios aportan a la bebida.
Tequila Paloma
La bebida espirituosa de agave más conocida de México tiende a tener un gran impulso en Estados Unidos en torno al Cinco de Mayo, cuando las margaritas son repentinamente muy solicitadas. Pero el tequila es una bebida espirituosa llena de matices que merece la pena consumir todo el año, siempre que se sepa beber correctamente, claro. Ángel Bolívar, barman jefe de Casa Neta en Nueva York, lo explica.
“Cuando bebo tequila, quiero ser capaz de experimentar el sabor real”, dice. Normalmente, el perfil de sabor dominante del tequila se extiende a las notas melosas del agave cocido, acentuadas por los cítricos picantes o la pimienta. Guarde la lima y la sal para preparar margaritas, palomas u otros cócteles, y beba el tequila solo, sin adornos.
“Cuando le ofrezcan un tequila solo, aproveche la oportunidad de saborear la verdadera esencia de la planta de agave”, dice Bolívar. En otras palabras, saborearlo y ver qué sabores detecta. Puntos extra por probar un vuelo de tequila. “Los vuelos son una gran manera de autoeducarse”.
Blanco: “Cuando bebo blanco, o plateado, un vertido de 1 onza puro para un trago es suficiente para mí”, dice sobre esta categoría, que suele tener un envejecimiento mínimo o nulo. Sin embargo, “no estoy en contra de un buen tequila blanco con soda y lima, por si quieres beberlo despacio”.
Espolón tequila margarita
Para tomar correctamente un chupito de tequila (o tequila cruda), se necesita sal, lima y tequila, todo ello realizado en un orden específico. El mantra que hay que recordar es “lamer, disparar, chupar”: Lame la sal de tu mano primero, bebe el chupito rápidamente y termina chupando un trozo de lima.
Este método es un éxito en las fiestas y con los turistas en México, pero se contradice con lo que recomiendan los conocedores del tequila: que hay que saborear lentamente el sabor y el aroma cuando se bebe tequila puro, sobre todo el bueno. Sin embargo, disfrutar de un chupito de tequila de esta manera añade un poco de diversión a una reunión y puede ayudar a atenuar la astringencia del alcohol.
“Tomar un chupito es una tarea polarizante. Como barman, mi obligación con los clientes cuando me pedían chupitos de tequila era responder “¿ruedas de entrenamiento?”. Las ruedas de entrenamiento se refieren a la guarnición de sal y lima que acompaña al chupito de tequila. La sal suaviza la aspereza del tequila, y la lima corta la picadura de la sal”. -Sean Johnson
El tequila suele tener entre un 35 y un 50 por ciento de alcohol, es decir, entre 76 y 100 grados. Un chupito de tequila estándar es de 1,5 onzas y, dado que el único ingrediente (aparte de una pizca de sal y un chorro de lima) es el tequila, tu bebida tendrá entre 75 y 100 grados. Aunque los chupitos son pequeños, divertidos y fáciles de beber, ten cuidado. Si no tienes cuidado, pueden provocar una embriaguez extrema o una intoxicación etílica. Es aconsejable limitarse a uno de estos chupitos por noche y disfrutar de una bebida más ligera antes y después.
Cócteles con tequila Espolón
El tequila Espolón es un destilado 100% de agave azul. Los valores de la marca ‒‒representan una especie de homenaje a la cultura mexicana, con su peculiar actitud ante la muerte y los antepasados difuntos. Cada botella tiene su propio grabado, que a su vez cuenta una historia protagonizada por esqueletos.
A pesar de que el tequila Espolón (o mejor dicho, El Espolón) no apareció en el mercado de los destilados fuertes de agave hasta 1998, esta marca tiene unos antecedentes muy sólidos. En los orígenes de la bebida se encontraba una pequeña destilería artesanal, construida en 1889 en Los Altos de Jalisco, famosa por ser la zona de agave más rica en azúcar, por un rico terrateniente local y aficionado al buen tequila, Don Selso Plasencia.
La situación cambió con el nieto del fundador del negocio familiar, Raula Plasencia, que en 1996-1998 construyó una empresa ultramoderna sobre la base de la fábrica de su abuelo, que recibió el nombre de: Destiladora San Nicolás. Es aquí, sobre la base de antiguas recetas familiares, combinadas con las últimas tecnologías, donde apareció el actual tequila Espolón, que en español significa “espuela de gallo” (en la tradición popular mexicana, el gallo se considera un símbolo de vitalidad y bienestar).